Noticias RCN, febrero de 2015
No tienen escuela y el único comedor infantil lo consumió un incendio .Los embera construyeron improvisados ranchos donde en cada uno viven hasta cuatro familias. «Llegamos a este lugar huyendo de la muerte, porque en el territorio que estábamos nosotros tiene fallas geológicas», aseguró el gobernador embera Marco Guasarabe. Son 500 embera que habitan los cambuches que carecen de agua potable y alcantarillado. Las enfermedades hacen parte del diario vivir de esta comunidad. Hace un mes un incendio arrasó con doce viviendas y el comedor escolar. Ahora los niños deben consumir los alimentos en el suelo.