UNA REPRESENTACIÓN VERDADERA
Por: Gustavo Alberto Ortíz Maldonado
En las clases de liderazgo que se imparten en todas las empresas se nos enseña que la misión que se le encomienda a un dirigente gremial, además de una mentalidad con miras al futuro, es la capacidad de generar diálogo entre los actores de la cadena de producción velando por la sustentabilidad del negocio, para lograr eso los dirigentes deben ir más allá de los intereses personales y plantearse una visión de mediano y largo plazo, a pesar de que los problemas sean de corto plazo. Sólo a través del diálogo se pueden conocer las fortalezas, debilidades y la comprensión de las distintas necesidades del gremio para poder propender por su posterior fortalecimiento.
Sin embargo lo que se ve en los dirigentes cafeteros es todo lo contrario, resultan nuestros mayores detractores. En efecto, cuando uno escucha las declaraciones, infortunadas todas ellas, que concede el señor James Maya a los medios periodísticos uno no puede más que quedarse estupefacto, lo que se preguntan todos los cafeteros es si este señor vive en otro país o si dejó de ser cultivador de café. Las afirmaciones más prometedoras en torno al extraño desempeño de nuestro Delegado Nacional de Risaralda ante la Federación de Cafeteros es que, verdad sabida y buena fe guardada, no es más que un fulano que le fascina jactarse de sus buenas amistades, sus idas a Bogotá tienen más bien el propósito de reunirse con sus amigos que cabildear por la suerte de los cafeteros, en Bogotá no hace más que buscar granjearse la simpatía de los cuadros directivos de la Federación de Cafeteros utilizando para ello la lambonería y la genuflexión, así los convenios que apoye resulten contrarios a los intereses de los cafeteros. Sus declaraciones no sólo son desafortunadas sino que transmiten desolación. En la pasada cosecha de final de año dijo que el café estaba en los palos, que sólo se había retrasado por cuenta del mal tiempo, ¿cómo se atreve, Maya? Transmitir esa percepción es hacerle creer al productor cafetero que su descalabro financiero sólo se debe al mal tiempo.
En una entrevista concedida a TODELAR nuestro Delegado Nacional, James Maya, dijo que la producción de Colombia aumentará y tendrá muy buenas posibilidades por cuanto Brasil tendrá una disminución en su producción, sin embargo lo que hasta ahora sabemos es que el gobierno brasileño informó el 19 de agosto al noticiero económico Bloomberg que la producción de café alcanzará cifras record en la estación 2012-2013 si continúan las condiciones normales de lluvia: “Está lloviendo normalmente y la tendencia es para largo; no hay indicaciones de que habrá problemas”. Para su información, Señor Maya, el servicio meteorológico de Brasil es de la más alta confiabilidad, y la muestra de ello es que la información elaborada en ese país es adquirida por parte de la NOAA de los Estados Unidos. Por otro lado, Tanzania espera doblar su producción en el período 2012-2013 y la producción de café en Vietnam se incrementará en un 10% en el mismo período, pero si a Usted le parecen poco contundentes las cifras futuras al menos deberá aceptar las cifras ya cumplidas, y en este sentido hemos sido desplazados al sexto lugar mundial de producción (Periódico Portafolio, agosto 29 de 2012). No juegue Usted con la buena fe de los cafeteros dándole falsas esperanzas sobre supuestos escenarios de calamidad de otros países, tal vez tengamos la suerte de mejorar nuestras expectativas pero seguramente no será por cuenta de su desastrosa gestión.
Señor Maya, los cafeteros de Marsella, Belén de Umbría, Santuario, Mistrató y Pereira le hacemos saber que no representa nuestro gremio aunque Usted empecinada y politiqueramente permanezca en él, su representación como Delegado Nacional del Risaralda ha sido una verdadera calamidad. La opinión que tienen cafeteros importantes de otros departamentos, y así nos lo han reclamado, es que auspiciando su presencia en Bogotá se le ha transmitido al Gobierno Nacional la sensación de que los cafeteros somos un gremio boyante mientras muchos otros agricultores carentes de subsidios se deslizan hacia la bancarrota. ¡Sus opiniones son irresponsables, Señor Maya! Usted, y muchas otras personas en la Federación de Cafeteros, no han podido entender que en el seno de la entidad debe prosperar una nueva democracia gremial: En efecto, con frecuencia se le escucha pronunciarse a los cuadros más representativos de la Federación como si no entendieran que los representantes elegidos a nivel municipal, departamental y nacional son los jefes naturales de los directivos que ejercen funciones ejecutivas, así es como funcionan las Juntas Directivas en cualquier otra empresa de Colombia o del mundo menos en la Federación, y eso tiene que cambiar. Cuando el Gerente General, Director Ejecutivo o Jefe de Oficina de cualquier Departamento o municipio son llamados a explicarse en torno a algún asunto, dichos funcionarios no pueden pretender llegar con agendas pre-elaboradas de necesario recibo y aprobación. Por eso nos llena de estupor que el Gerente General de la Federación desconozca la decisión mayoritaria de cambiar el Director Ejecutivo del Comité Departamental de Risaralda, o que personas como Usted en forma irrespetuosa digan que las manifestaciones de inconformismo de algunos representantes al Comité Municipal de Marsella (Risaralda) no son más que manifestaciones de personas que desean hacer política dentro de la Federación. El politiquero es Usted que como aspirante a la Alcaldía de Apía recibió una soberana paliza, el politiquero es Usted que quiere hacer del Comité Departamental de Cafeteros del Risaralda y luego de la Federación Nacional su coto de caza para saciar sus ansias de poder. Lo vimos en las pasadas elecciones cafeteras donde en un toque de último momento Usted modificó la suplencia normal del representante de Pereira al Comité Departamental de Cafeteros por la suplencia de Apía, con ello la candidata principal de Pereira que logró unos pocos votos en las elecciones fue arrastrada hacia el triunfo con los votos de Apía. El propósito de esta urdimbre fue impedir que el suplente natural de Pereira, de lejos mucho más competente que Usted, resultara elegido y pudiera restarle importancia a su catastrófica gestión de la cual nos lamentamos hoy. Usted no ha querido entender que la época en la cual la Federación de Cafeteros se dedicaba a impartir doctrina a cafeteros de poncho, ruana y sombrerito está tocando a su fin. Cuando quiera le demostramos que aún en un humilde Comité Municipal de Cafeteros existen personas más preparadas académicamente que Usted y que no puede referirse a nosotros en términos desobligantes.
Ha dicho Usted, Señor Maya, en una entrevista radial que el Diputado Julio César Londoño no puede hacer cuestionamientos a la Federación porque ni siquiera es cultivador de café, pues qué raro que según Usted un político elegido por voto popular no pueda ejercer ese control político, para su información la parafiscalidad según el Consejo de Estado y la Corte Constitucional autorizan al Estado a intervenir a entes privados como la Federación de Cafeteros. Todas esas manifestaciones abusivas de su parte se deben a que Usted y otros más no tienen experiencia democrática empresarial, le haremos saber a Senadores y Representantes que según Usted ellos no pueden citar al Gerente de la Federación al Capitolio Nacional.
Por eso en lo sucesivo, y cuando su labor entorpecedora no esté presente, estaremos pidiéndole cuentas al Gerente General a partir de qué momento de este año se volvieron rentables las tiendas Juan Valdés como prometió en su alocución en el Senado; en qué va la posibilidad de que los cafeteros importen sus fertilizantes, lo cual según el Viceministro de Agricultura se decidiría después de las respectivas consultas con la Comunidad Andina de Naciones; de cómo puede pasar que la planta administrativa de la Federación sea más amplia que la planta de extensionistas, y un largo etcétera del cual nos estaremos apersonando permanentemente. La totalidad de los funcionarios tendrán que aprender la nueva democracia empresarial que la Federación desconoce, no podrán continuar desconociendo las quejas de los confederados, incluso argumentando estrategias que resultan visiblemente contrarias al clamor general: Hace pocos días el Director Ejecutivo del Comité de Cafeteros de Risaralda, Omar “El inamovible” Acevedo dijo a un medio periodístico que “no hay malestar por la contribución cafetera”. ¿Cómo? ¿Que qué? ¿Es eso posible? ¿Los debates, incluso en Plenaria de Senado, uno de ellos convocado por los Senadores Guillermo Santos, Juan Carlos Vélez y Rodrigo Villalba, donde los cafeteros han expresado su inconformidad por la mencionada contribución nos los hemos soñado? ¿Han sido figuraciones calenturientas de nuestras enfermizas mentes o producto de nuestro descalabro económico? Pongámonos de acuerdo en algo: ¿los presidentes, directores o gerentes de gremio deben defender los intereses de sus agremiados o los de quién? ¿Para quién trabaja Usted, el Gerente o los Directores Ejecutivos? Cuando por televisión, o radialmente, se muestran las expresiones de los directivos de otros gremios el propósito que tienen es salir a expresar las necesidades más sentidas de sus confederados, el deseo de conseguir mejores oportunidades para el gremio, o a convocar a las fuerzas vivas del Estado para pedir apoyo y subsidios, pues ahora resulta que según el señor Luis Genaro Muñoz los marselleses somos unos mendigos, y él no va a salir a pedirle al gobierno dinero para los cafeteros. Pues entonces que renuncie. Aquí en Colombia hasta los banqueros cuando van a la bancarrota invocan el auxilio del gobierno, a pesar de que privatizan sus ganancias y socializan sus pérdidas se rescata la banca porque un Estado sin banca no tiene soberanía, un Eje Cafetero sin café es un foco de insurgencia incontenible que puede costarle al Estado miles de millones dólares. En todos los gremios de todas partes del mundo se pide ayuda, menos en el gremio cafetero de Colombia y todo por cuenta de personas que como Usted, Señor Maya, siguen sin entender sus funciones.
Dijo también Omar “El inamovible” Acevedo que “en cuanto al futuro de los precios del café, es volátil pero firme, los mercados son muy inestables y el cafetero tiene que acostumbrarse a aprovechar las oportunidades de precio”. Habida cuenta de que la propiedad cafetera en Colombia está atomizada, y los pequeños propietarios son mayoría, el productor no tiene más remedio que acogerse a los precios instantáneos de la bolsa para remediar su imperiosa necesidad inmediata, por ser el café un producto estacional los grandes tostadores ya tienen calculado el precio mínimo de compra que el productor pobre tendrá que tomar. Pareciera que no hay remedio para ello, pero no es cierto, Brasil planea doblar el financiamiento para el almacenamiento de café, “el ánimo es facilitar al productor el almacenamiento de café para que pueda venderlo en la mejor oportunidad”, dijo Edilson Martins de Alcantara recientemente en la Organización Internacional del Café. Existen los formalismos numéricos apropiados para disminuir (no erradicar) el impacto de los grandes especuladores (Programación Dinámica y Horizontes no acotados), y también la infraestructura que alguna vez tuvo la Federación de Cafeteros entre la que se cuenta una capacidad de almacenamiento de 12 millones de sacos de café. Adicionalmente existe la propuesta del dólar diferencial para los cafeteros impulsado alguna vez por el presidente Juan Manuel Santos en su época de candidato presidencial.
Algunas veces sí hay afirmaciones certeras, aunque desenfocadas, hechas por funcionarios de la Federación Nacional de Cafeteros, por ejemplo Omar “El inamovible” Acevedo dijo que “a nadie se le vende lo que no se tiene. Lo que esperamos es un mayor volumen de producción y retomar mercados en los que el café colombiano fue reemplazado”. Eso si es rigurosamente cierto, algunas tostadoras ya le están comprando café a Salvador y Kenia, sin embargo el problema de retomar mercados es que cuando las empresas quiebran éstas no pueden “desquebrarse” simplemente porque existe demanda del producto, restablecer las infraestructuras pasadas resulta más costoso cuando al productor le ha tocado cambiarse de medio de subsistencia. Por eso cuando Usted, Señor Maya, dice en una entrevista radial que el personaje que acudió a la Asamblea Departamental a hacer un supuesto escarnio de Juan Valdés es un criador de búfalos lo que sorprende es saber los medios de subsistencia a los que ha tenido que acudir el cafetero para sacar a su familia adelante, guardadas ciertas proporciones es como cuando al piloto de vuelos internacionales le toca tripular una avioneta de fumigación porque perdió su pasado empleo.
La pregunta final es: ¿De quién es la Federación Nacional de Cafeteros? Se dilapidaron propiedades como Agrícola de Seguros, Banco Cafetero, Corporaciones Financieras, CONCASA, la Flota Mercante GranColombiana y todo sucedió sin tener en cuenta a los cafeteros. Por cuenta de esa actitud, en Marsella el Banco Cafetero fue reemplazado por DAVIVIENDA al cual no le importa la suerte de los cafeteros porque esa no es su misión, ese banco sabe que el campo no es rentable en ninguna parte del mundo y por eso lo subsidian en los países desarrollados. ¿De quién es la Federación Nacional de Cafeteros? De las muchas gerencias que tiene, allá hay Gerente de Proyectos Comerciales, Comunicaciones y Propiedad Intelectual, Super-Gerentes, Gerentes, Sub-Gerentes y Contra-Gerentes, allá hay Gerencias para todo y contra todo, Gerencia para entrar y Gerencia para salir, y en algún momento también se crearon Gerencias para complacer a familias de rancio abolengo cuya asignación de funciones resultaba completamente desconocida para todos, parece ser que en la Federación prosperan aún los apellidos rimbombantes de esas esclarecidas familias. ¿De quién es la Federación Nacional de Cafeteros? El escritor francés Daniel Pecaut deslizó la conjetura de que la Federación podría pertenecer a algunos exportadores americanos que con nombres criollos se hacen pasar astutamente por colombianos solventes, y tienen el poder de modificar los precios del café hasta casi causar la hambruna del productor.
Los cafeteros de Colombia necesitamos una visión nueva y más comprometida por parte de la Federación Nacional de Cafeteros, una Federación abierta y receptiva al control operativo y financiero, que permita ser cuestionada sin acudir a epítetos injuriosos contra los que la cuestionamos, y Usted, Señor Maya, no es la persona apropiada para cumplir con esa misión. Váyase, Señor Maya, su actitud de rodilleras y babero nos está arruinando a los cafeteros no sólo de Risaralda sino del país entero.